Capitulo 29:

Nessa la miró, era la primera vez que se dirigía afectuosamente hacia ella. 



Las manecillas del reloj marcaban las dos de la tarde cuando Nessa se despertó. Se había levantado bastante tarde, pero bueno, la verdad es que también se había acostado a las cuatro de la mañana.


Fue al baño y se hundió en la tina llena de espumas, se sentía relajada y tranquila, como hacía tiempo no lo estaba. 



Salió y se colocó un calentador blanco ajustado y y una blusa rosa de tiras.



En cuanto pensó que estaría lista para comer caminó hacia la puerta y giró la perilla. 



- qué?- dijo el ver que esta estaba con seguro. La forzó unas cuantas veces pero estaba cerrada con llave. - 

Seguramente me quiso hacer una bromita. 


Nessa tomó el armador que usaba siempre en aquellos casos y abrió la puerta. 



Caminó por el pasillo y se dirigió a la cocina cuando escuchó una voz... 


- qué haces.- dijo el rubio por detrás de ella. 


Nessa se volteó y sintió cierto escalofrío al observar sus ojos azules, que parecían brillar con un sentimiento muy parecido al cual sentía cuando él la secuestró. 


- iba a comer.- dijo Nessa sonriente. 

*Cómo puede ser tan hipócrita??* pensaba Zac. * sonríe y me mira con esos ojos...cuando lo único que hace es fingir..fingir que me quiere para que la saque de aquí..* 




- Te pasa algo Zac?- dijo Nessa. 

La morena caminó hacia él y se dispuso a darle un beso, pero entonces el rubio la tomó fuertemente por la muñeca, casi torciéndole el brazo. 



Nessa soltó un grito de dolor.

- qué haces?!- dijo Nessa. 


- No me vuelvas a tocar nunca más asquerosa sangre sucia!- dijo Zac mientras la soltaba con tan fuerza que hizo que cayera al suelo. 



Nessa lo miró desde abajo con los ojos llorosos. 



- Por qué me hables así? qué te pasa?!- dijo Nessa llorando.



- Te hablo como a mí se me de la gana Hudgens! sabes por qué? porque soy tu dueño..y tu verdugo..soy yo el que te va a entregar en las mano de Jared.. soy yo quien te tiene secuestrada... 



- qué estás diciendo! no te entiendo!- dijo Nessa llorando cada vez más. 



Tenía miedo. Los ojos frívolos de Zac la miraban con desprecio y furia. 



- Mira Hudgens, las cosas van a cambiar por aquí..ya me acosté contigo, ya tuve todo lo que quería de ti y la verdad no estás tan buena como pensé. Ya me cansé de ti maldita zorra, me cansé de verte, de oírte, me tienes harto! vas a volver a tu encierro, y no te quiero volver a ver ni oír hasta cuando te entregue a Jared y disfrute de cuando te maten al igual que a tus padres! 





-No..- dijo Nessa llorando. - Estás mintiendo...no es verdad tu no me usaste..!- decía ellla tapándose los oídos y llorando inconsolablemente. 



Zac la tomó por el brazo y la levantó del suelo bruscamente,Nessa sintió que su brazo se había dislocado. 



- Es verdad! o de verdad pensaste que podría enamorarme de una asquerosa sangre sucia como tu?! eres demasiado insignificante! y ahora vas a hacer lo que yo te diga, de ahora en adelante no tendré más contemplaciones contigo...eres tan solo una zorra más en mi lista. No eres diferente a las demás que he llevado a mi cama...o bueno, sí, eres diferente...eres la más despreciable a la cual le he hecho el favor. 



Zac estaba descontrolado, ya no sabia lo que decía, la odiaba..lo único que quería era hacerla sufrir tanto como él sufría en aquellos instantes.. 



Nessa lloraba y sentía que en cualquier momento iba a desmayarse.



Zac caminó arrastrándola por el brazo por el pasillo hasta llegar al cuarto de la morena, la lanzó adentro y Nessa cayó al suelo nuevamente. 



- No quiero ni siquiera oír tu patética respiración me oíste!?- dijo Zac, y con esto cerró la puerta fuertemente. 




Nessa no tenía fuerzas ni siquiera para levantarse del piso. 


Se quedó allí, llorando, y deseando que pronto llegara la hora de que Jared la matara, de una vez por todas. 





Ashley tocó el timbre de la casa de Nick.



Se había prometido así misma no volver, pero parecía que el destino se encargaba de reunirla allí.


Necesitaba hablar con Corbin, y por lo que sabía estaba en aquella casa. 



Nick abrió la puerta. 


- Hola.- dijo Ashley. 


- Hola.- dijo Nick dándole paso. 


Ashey entró y Nick cerró la puerta. 


- Corbin está aquí?- dijo Ashley. 


- Acaba de irse.- dijo Nick. - podrías buscar un mejor pretexto para verme no te parece? 


Ashley lo miró impactada,Nick la miraba con sus ojos marrones brillantes y con notable enojo..solo que ella no comprendía por qué... 



- no es un pretexto. No quiero verte, solo necesito hablar con Corbin. 


- ah! cierto! cómo pude ser tan estúpido? se me olvidó que como no pudiste levantarte al mejor amigo de tu hermano decidiste hacerlo con otro..vaya que eres rápida.- dijo Nick utilizando el sarcasmo y a la vez furioso. 



- No me ofendas! - dijo Ashley amenazadoramente. Aún así su voz no dejaba de ser dulce. 


- No, yo no te ofendo..solo me limito a decir la verdad. Porque no todos los días conoces a una chica que te diga que está enamorada de ti, y al siguiente día está saliendo con otro! 



Ashley comprendió a lo que Nick se refería. 



- Pues no tienes derecho a reclamarme! tu te has besado y de todo con otras mujeres en mis narices! y yo me las he aguantado! te dije lo que sentía por ti y tú me alejaste porque soy la hermana de tu mejor amigo! no pienso esperarte toda la vida Nick....ya he esperado por ti suficiente tiempo. 



- Yo no te he pedido que lo hicieras.- dijo Harry. 

Ashley lo miró incrédula. 


- Pero sí quieres que no tenga a nadie no es así? 


Nick se quedó callado. 


- Eres imposible!- dijo  Ashley dándose media vuelta, dispuesta a salir. 


Pero entonces Nick la tomó por el brazo obligándola a darse la vuelta con tal fuerza que Ashley se pegó contra el pecho de Nick mientras este la tomaba por la cintura y la pegaba contra sí. 




Los dos podían sentir sus alientos, su respiración, sus bocas se rozaban provocándose. 


Nick lo había deseado desde hacía mucho tiempo...tenerla así de cerca..junto a él...y a la vez le parecía que lo que hacía estaba mal..pero ya no podía aguantarlo más.


Ashley pensó que en cualquier momento se iba a desmayar...sus piernas temblaban al igual que el resto se su cuerpo..sentirlo tan cerca hacía que su corazón latiera a mil. 



- eres mía..- dijo Nick y con esto la besó. Ashley sintió que el chico estaba absorbiendo todo el aire que tenía dentro de ella, su cuerpo de agitaba cada vez más mientras Nick intensificaba el beso. 




Nessa se quedó profundamente dormida tras lo ocurrido con Zac, la verdad era que a pesar de que había dormido ya lo suficiente, el dolor que sentía la había hecho volver a caer sobre la cama. 


Cuando abrió los ojos estos le ardían y se sorprendió al ver el reloj, que marcaba las nueve de la noche. 



Sintió un ardor en el estómago, no había comido nada en todo el día.



Mas seguramente el inhumano de Zac se había olvidado de ello.



Los ojos de Nessa se llenaron de lágrimas nuevamente al recordar las palabras empleadas por el chico. 


No podía creer que hubiera caído un su trampa. Qué clase de estúpida era? cómo pudo pensar que Zac cambiaría? cómo pudo siquiera creer que él estaba enamorado de ella? Se lo merecía por ingenua e idiota, todo lo que le pasaba lo tenía bien merecido. 




Zac estaba en la sala.


Había llamado a Esther para que fuera aquella noche. 


Lo único que quería era humillar a Nessa, hacerla arrastrarse como un gusano por lo que le había hecho. 


- Soy un imbécil!- dijo golpeando con el puño la pared. 


La odiaba, la odiaba con toda su alma..pero ella iba a sufrir por el daño que le había hecho..él se iba a encargar de hacerla pagar caro. 



Nessa estaba sumida en sus pensamientos cuando la puerta de abrió de golpe. Nessa fijó sus ojos llenos de rencor en los de Zac. 


El chico caminó hacia ella y la tomó fuertemente y sin nada de gentileza por el brazo. 

Nessa sintió que si no la soltaba pronto le sacaría el brazo. 

- Me lastimas suéltame!- dijo Nessa. 


- A mí que me importa si te lastimo o no! me importa poco lo que le pase a una sangre sucia perra como tu..- dijo Zac mientras la sacaba agarrada del brazo mientras ella forcejeaba. 


La llevó hasta la sala y la lanzó mientras ella caía al suelo nuevamente. 



- Esther va a venir, así que quiero que la casa esté limpia... 


- eso es mi problema!- dijo Nessa. 


- Sí lo es! eso es lo que las sangre sucia están destinadas a hacer en este mundo! a limpiar pisos...y es eso lo que vas a hacer! 



Los ojos de Nessa se llenaron de lágrimas de rabia.


No podía soportar aquella humillación, podía ver en el rostro de Zac como disfrutaba de aquello. 



El rubio caminó hacia la cocina y en segundos salió y le lanzó un trapo.


Nessa lo miró enfrente de ella. Su respiración se volvía agitada..no lo soportaba más.



Apretaba con tantas fuerzas los puños de las manos que se estaba enterrando las uñas en las palmas. 



- Limpia..eso es lo único que sabes hacer bien.- dijo Zac. 



- Y si no lo hago qué!?- dijo Nessa mirándolo retadoramente desde el suelo. 


Su rostro estaba lleno de ira y de humillación.


Sus ojos marrones resplandecía con lágrimas de furia y odio. 



Zac la tomó por el cuello con una sola mano y apretó levemente, lo suficiente para producir temor en la chica. 



- Si no lo haces entonces me desquitaré con tus amigos...primero Jonas..después Tisdale..y así seguiré..así que depende de ti. 


Zac la soltó bruscamente. 


La odiaba, por fin se estaba desquitando por lo que le había hecho...ella se iba a arrepentir de haberse metido con un Efron. 



Nessa se tragó su orgullo como si fuera vidrio y tomó con manos temblorosas el trapo. 



Empezó a limpiar mientras lágrimas seguían corriendo por su rostro. 



- Y ya deja de llorar que solo hace más patética la escena!- dijo Zac. 



Los ojos de Zac brillaban de satisfacción ante la escena. 


Nessa limpiaba mientras temblaba llena de ira...ya no podía más. 


El timbre sonó. 

Zac le dirigió una gélida mirada. 



- Te quedas ahí,- dijo Zac mientras caminaba hacia la puerta. 



Esther entró y colocó los brazos alrededor del cuello del chico dándole un beso.


Nessa sintió que si no salía ya mismo de aquel lugar iba a matar a alguien, si es que ella no moría antes. 


Zac cerró la puerta y los ojos de Esther se fijaron en Nessa, que limpiaba el suelo.



Esther miró a Zac confundida. 



- Creí que no te permitían hacerla trabajar.- dijo Zac. 


- A mí nadie me prohíbe nada.- dijo Zac. - Yo hago lo que quiero. 



Esther le sonrió mientras dejaba su túnica en el mueble. Luego volvió a mirar a Nessa. 



- Debo decir que hasta me das lástima Hudgens...pero bueno, algunos nacimos para estar arriba, y otros para estar abajo. 



Nessa dejó de limpiar. 


Tenía la cabeza mirando al suelo.Zac la había humillado suficiente como para que ella lo hiciera.


*Vamos Nessa, tú eres mejor que esas dos basuras...no dejes que te aplasten* pensó.


Reunió todas las fuerzas que aún le quedaban y levantó la cabeza, poniendo nuevamente su mentón en alto.


Zac se sorprendió al ver que en sus ojos marrones no había rastro ya de enojo o indignación, mas bien había un brillo que demostraba una odiosa superioridad, como si ella supiera algo que ni él ni Esther sabían. 



- Sí, puede ser.- dijo Nessa mirando a Esther y luego siguió limpiando. 



- Cuidado cómo les contestas a mi novia Hudgens!- dijo Zac. 


Nessa lo miró nuevamente, seguía con esa altivez que estaba empezando a desesperarlo. 


- Pero si solo le he dado la razón..- dijo Nessa. - Ahora, si no les importa, voy a seguir limpiando el piso.- Nessa sonrió y siguió con su trabajo. 


Ashley y Nick estaban acostados en el sillón de la sala. 


El chico se había puesto un calentador y ella estaba con la camisa de él puesta. 


- Esto te queda enorme lo sabías?- dijo Nick riendo al verla. 



- Sí, pero me gusta.- dijo Ashley devolviéndole la sonrisa. 


Nick la abrazó con todas sus fuerzas. 


- Ya sabes lo que tenemos que hacer no es así?- dijo Ashley. 


- Claro, hablaremos con Corbin mañana y le explicaremos, estoy seguro de q si le explicamos.. 



Ashley se levantó bruscamente. 


- estás loco?Corbin no puede saber de lo nuestro! va a estar totalmente en contra! el no quiere que tengamos nada no lo va a aceptar! 



- Pero no pretendes que lo mantengamos en secreto o así?- dijo Nick levantándose él también. - No me gustan las mentiras y lo sabes. 



- Solo te pido tiempo..por ahora mantengámoslo en secreto..después veremos cómo decírselo.. 



Nick dio un respingo mientras Ashley lo miraba con ojos suplicantes. No pudo negarse. 



Esther miró despectivamente a Nessa y luego tomó a Zac por la túnica. 



- Podemos dejarla aquí e ir a tu cuarto?- dijo la rubia sonriéndole peligrosamente. 



- Claro.- dijo Zac devolviéndole la sonrisa. Luego miró a Nessa con ira. 



- Termina y te encierras me oíste? no quiero saber de ti hasta mañana. 


Con esto Zac y Esther caminaron por el pasillo.



Nessa no se levantó del suelo hasta que escuchó la puerta de Zac cerrarse con seguro. 



La castaña tomó el trapo y lo rompió por la mitad mientras lo lanzaba con furia hacia la pared. 



Lo odiaba! lo odiaba con toda su alma! Trató de tranquilizarse mientras caminaba hacia la cocina. 



La chica abrió la refrigeradora y vio un plato con un sándwich. 



Lo puso sobre la mesa y empezó a comer. 


Tan pronto terminó en el plato apareció otro. Tenía que pensar con cabeza fría lo que iba a hacer, definitivamente ya no podía vivir más en aquel infierno. 


Solo de pensar en lo que estaban haciendo ellos dos allí dentro...en la cama donde ella había dormido un mes entero.. sintió que se enfermaba lentamente. 



Nessa despertó a la mañana siguiente en el sillón de la sala. 


Abrió los ojos e inmediatamente vio que ya no estaba la túnica de Esher, por lo tanto ya se había ido.



Caminó por el pasillo y vio la puerta del cuarto de Zac abierta..tampoco había nadie.


Todos se habían ido. 

Nessa entró a su habitación y tomó la piedra. 


Tristemente tachó el mes de Abril, que había ya terminado dándole comienzo al de mayo. 




Zac cabalgaba velozmente entre los árboles sobre un caballo negro, seguido de Esther. 



Ambos esquivaban todo lo que se interponía entre ellos hasta que llegaron al claro del bosque.



Zac haló las riendas del caballo y bajó de éste. 


- Viniste.- dijo una voz fría y tétrica.



- Vine porque tengo nueva información.- dijo Zac mirándolo con ojos fríos y gélidos mientras Esther hacia reverencia. 



La risa de Jared de escuchó debajo de ese sobretodo negro que tenía puesto y ocultaba toda su persona. 



- cuál es esa información mi fiel vasallo? 



Zac respiró hondo y una media sonrisa se fijó en sus labios. 



-Hudgens ha recibido ya su primer mensaje...de Galatea. 

Nessa después de bañarse se encerró en su cuarto. 


Pensaba en qué era lo que debía hacer después de todo lo que estaba sucediendo.



Zac se estaba portando como una bestia con ella...tal vez él nunca dejó de ser ese ser que ella tanto aborrecía y solo lo ocultó para acostarse con ella..



*basta Vanessa! deja de pensar en él! solo te haces más daño..* se dijo así misma mientras se levantaba y caminaba por el pasillo a buscar un vaso con agua, pero entonces se detuvo ante la puerta abierta del cuarto de Zac. No supo por qué lo hizo, pero sintió un impulso que iba más allá de sus fuerzas y entró, sin poder controlarlo. 



Sintió una presión dentro de su corazón.




Aquella habitación le recordaba tantas cosas...y pensar que él había estado allí con Esther. 



*maldito! y aún así te quiero...soy una idiota!* se dijo.



Nesa se acercó a la camisa de Zac que estaba sobre la cama y la tomó acercándola a su rostro.

Cómo amaba aquel aroma que despedía de todo lo que él usaba...era tan masculino..tan de él..Cómo podía seguir queriéndolo? aquello era un grave error. 



- Qué estás haciendo Hudgens?- dijo Zac entrando a la habitación. 


Nessa soltó de inmediato la camisa de Zac. 


- Nada.- dijo ella petrificada. 


Zac la miró con sus ojos azes penetrantes y desafiantes. 


- Estabas buscando algo no es así? - dijo el rubio rodeándola. 


- No.- dijo ella casi sin respirar 


- Mientes!- gritó Zac. 


* vino por el intercomunicador, para hablar con sus amigos o con el estúpido de Chad...para burlarse de mí.* pensó Zac.


- No miento! y ya deja de gritarme! estoy harta de tus malos tratos!- dijo Nessa mirándolo furiosa. 


- Yo te grito si a mí me da la gana de hacerlo Hudgens! ubícate quieres?! ponte en el lugar que te corresponde! 



-donde correspondo es con mis amigos! fuera de este maldito encierro! ahí es donde pertenezco y no estoy!- dijo Nessa mientras salía furiosa de la habitación, pero entonces Zac la detuvo. 



- No te preocupes, que pronto saldrás de aquí...en cuanto recibas el mensaje completo Jared te reunirá con todos tus amigos.. 



Nessa se volteó y lo miró. Zac sonrió perversamente. 



- Él ya sabe que recibiste el primer mensaje...y así le iré informando, cada vez que los recibas. 



Nessa lo miró incrédula.


No podía creer que él fuera tan frío..la había entregado en bandeja de plata a las manos de su verdugo...y parecía no importarle en lo más mínimo. 



- Pues bien, espero que te sientas feliz con esto. - dijo Nessa mientras salía corriendo del cuarto. 

Zac golpeó la pared y cerró la puerta con todas su fuerzas.

No, no se sentía bien. Sentía un dolor agudo en el pecho..de solo pensar que Nessa corría peligro... 


*maldita sea no te tiene que importar! ella es una perra y te engañó! te engañó solo para que la sacaras! se burló de ti! y tu caíste como un imbécil!* pensó el rubio. 




Y sin embargo...tal vez a ella no le había quedado otra alternativa...no le había quedado otra salida que enamorarlo para salir de allí, para salvar su vida.




Por qué él tenía que despreciarla si lo único que hizo fue intentar escapar de la muerte? En realidad no tenía razones para odiarla...pero lo hacía..porque él sí se había enamorado de ella...y el solo saber que ella no lo hacía era razón suficiente para despreciarla con todas sus fuerzas. 







Zac se sentó en su cama y se sostuvo la cabeza con ambas manos. 






* no puedo culparla por no amarme...cómo alguien como ella podría siquiera fijarse en mí..no le llego ni a los talones..para ella solo debo ser un miserable aguilucho* 




Nessa estaba en su habitación.



Sus ojos brillaban por lágrimas que se asomaban, pero se las contuvo.



No iba a llorar más, ni siquiera por que Zac había sido capaz de entregarla, así de fácil.



Respiró profundo, lo más profundo que sus pulmones se lo permitían. 



- Olvídalo, y piensa lo que vas a hacer.- se dijo. 

Entonces sintió un dolor agudo en sus oídos..una voz infantil, como de una niña se asomó en su cabeza. 

"En mi habitación, 
duerme una suicida, 
duerme, pequeñita, 
duerme" 



Nessa sintió como si una luz de flash la cegara por completo. Un grito provocó que Zac se percatara que algo andaba mal. 



Nessa cayó al suelo mientras imágenes venían a su cabeza rápidamente. 



Una niña de cabello plateado yacía en una cama, no se movía, parecía muerta. Abrazaba un oso viejo mientras se escuchaba el tic tac de reloj. 



Entonces la niña abrió los ojos bruscamente, mostrando sus grandes pupilas plateadas, al igual que su cabello. Se levantó y la cama y fue corriendo hacia ella. 



Zac entró a la habitación y vio a Nessa tirada en el suelo, gritando y llorando mientras rasguños se producían en su rostro y cuerpo, rasgando el vestido por completo...pero no había nadie..nadie los hacía....se producían sin causa alguna. 




Zac corrió hacia ella y la sostuvo.



Nessa seguía gritando y agitando sus manos como defendiéndose de algo que no existía, y mientras tanto más rasguños por todo su cuerpo se producían. 

La niña seguía aruñándola con fuerza,Nessa trataba de defenderse pero no podía, ella seguía hiriéndola. 



Entonces la niña la miró y dijo en voz muy baja algo que Nessa no puedo entender...después de eso con solo mirarla la lanzó contra la pared... 



Entonces despertó. Vio llorando cómo Zac la abrazaba fuertemente, pidiéndole que se tranquilizara. 



Inspectores del ministerio y la orden de Merlín rodeaban la casa de Corbin. 


Al moreno ya le habían hecho un sin número de preguntas sobre el incidente, ya la verdad no quería tocar más el tema.


Aquello había sido desagradable, no solo por el hecho de que su perro estaba muerto, y él le tenía mucho cariño..sino porque los aguiluchos habían sido capaces de demostrar nuevamente que podían burlar a los guardaespaldas como si nada. 



Ashley y Nick estaban sentados junto al moreno. 



Alexis  Alexander no habían podido recibir aún la noticia, mientras que la señora y el señor Tisdale hablaban afligidos por lo sucedido. 



- Lo importante es que estamos bien y juntos.- dijo Ashley abrazando a Corbin. 


- No, no estamos juntos Ashley...Nessa no está.- dijo el moreno mientras se levantaba y caminaba hacia fuera de la casa. 




Las luces de los carros de policías y guardias del ministerio iluminaban el lugar. 



Aquella parecía ser la noche más oscura de todas.Corbin sintió un vacío al recordar a Vanessa.



Se volteó para ver dentro de la casa y vio a Ashey llorando..seguramente porque él le había recordado a su mejor amiga.



Nick la abrazaba consolándola, pero en sus ojos marrones también lágrimas se asomaban.



Corbin se pasó la mano por su cabello, por alguna razón tanto dolor lo había vuelto inmune al dolor de los demás...ya casi ni le importaba.


Nessa podía estar muerta mientras él estaba allí, sin poder hacer nada.. 



* si no la hubiera dejado sola...* pensó otra vez como casi siempre lo hacía, sintió el impulso de golpear algo pero entonces, unos ojos celestes lo calmaron y una voz dulce se dirigió a él como una brisa. 



- Lo siento tanto.- dijo Miley mientras tomaba el rostro de Corbin con sus manos. - Pero no estás solo lo sabes? 

Corbin la miró fijamente. 


- Sí estoy solo, es así como me siento.


Los ojos de Miley se llenaron de lágrimas. 



Se veía tan hermosa, su piel brillaba y sus labios rosa parecían los de una flor.






Miley abrazó a Corin con todas sus fuerzas. 








El moreno se sorprendió ante esto, pero correspondió de inmediato. Aquel tierno y sutil abrazo, tal como ella era, lo hacía sentir protegido y ...amado? 





Miley acercó sus cálidos labios a la oreja derecha de Corbin: 
- nunca has estado solo, yo siempre he estado contigo...solo que has sido demasiado ciego como para verlo. 




Con esto Miley se separó de él. 



Le dio una última mirada con algunas lágrimas cayendo por su solitario rostro y se fue. 



Corbin por primera vez en mucho tiempo tuvo las cosas claras. 






Zac tomó a Nessa y la cargó hasta la cama. 


La acostó suavemente mientras ella seguía llorando y observando ciertos rasguños que tenía en su abdomen y piernas. 



- tranquila, estoy aquí..ya pasó todo.- dijo Zac tomándola entre sus brazos nuevamente.



Nessa se abrazó al pecho del chico con fuerza. 



Ese calor protector que tanto necesitaba estaba allí. 




Respiró profundo y trató de hablar, pero no pudo así que siguió llorando en silencio. 



- Fue otro mensaje de Galatea no es así?- dijo Zac casi susurrando. 



Nessa tragó saliva. 



- No.. - dijo ella. 



- No tienes que mentir, ya no le diré a Jared.- dijo el rubio. 



- No te creo nada.- dijo Nessa. 


Juntó todas sus fuerzas y se soltó de los brazos del chico.



Se abrazó a una de las almohadas de la cama mientras seguía sollozando. 



- No importa, sé que fue un mensaje de ella. - dijo Zac algo dolido por el rechazo de la morena. 



- cómo hizo para herirme?- dijo Nessa. - ahora entiendo lo del golpe en mi cabeza... 


Zac quiso acercarse, pero entendió que no era la mejor en aquellos momentos. 




- Te dije antes que ella puede herir a criaturas oscuras con solo pensarlo..hasta matarlas.Supongo que como ahora no sigue instrucciones hiere a quien quiere..y como puede comunicarse contigo..creo que esta desesperada porque entiendas en mensaje, no creo que lo haga apropósito..tan solo es una niña. 




Nessa permaneció en silencio.Zac se levantó de la cama. 




- Voy por algo para curarte eso.- dijo mientras salía del cuarto. 

Nessa seguía acostada en la cama cuando Zac entró con alcohol y toallitas.




El rubio se sentó enfrente de ella mientras la morena también lo hacía. 



- Levántate la blusa.- dijo Zac. 


Nessa se levantó todo lo que pudo dejando ver las marcas de los rasguños en todo su abdomen.


El rubio humedeció una toalla con alcohol y la colocó en las heridas. 


Nessa dejó salir un leve gemido. 


Le ardió mucho pero ya ni fuerzas tenía para gritar. 


Zac colocaba la toalla lo más delicadamente que podía, tratando de que ella sufriera lo menos posible. 

Terminó con el abdomen y entonces le subió delicadamente las bastas del calentador, tomó con sus manos la pierna derecha de a chica. 


Ante esto Nessa tembló y movió la pierna en otra dirección.