Capitulo 23:La insufrible

-qué me ves..- dijo Zac.

- Nada..- dijo Nessa sonriendo.

- ah..más te vale.- dijo Zac.

Nessa rió. No podía creer que todo aquello estuviera pasando de verdad. Lo amaba tanto.



- Hace tiempo..bueno, desde que te hice mía por primera vez...que te quiero preguntar algo.- dijo Zac.

Qué es?- dijo Nessa.

- Con quién tuviste tu primera vez?- dijo Zac. - cuando, donde, cómo...

- Jaja.- rió Nessa. - esas son varias preguntas..

Nessa lo miró, se dio cuenta que aquello de verdad le importaba, así que decidió responderle.

- Se llamaba Adam.- dijo finalmente. - Lo conocí en el ministerio. 

- Estabas enamorada de él?- preguntó Zac.

- No.- dijo Nessa. - Pero sí lo quería mucho. En realidad creía estarlo, pero después me di cuenta que solo era una confusión..por eso no funcionó.

Zac se acercó más a ella, sintiendo el calor de su cuerpo cerca del suyo. Acariciaba su rostro, su piel era tan suave.

- Tenemos que hablar..- dijo Zac.

- sobre qué?- dijo Nessa

- Sobre nosotros...sobre cómo vamos a tomar esto.


Nessa se sentó, había un rastro de miedo en su rostro. No sabía en realidad cómo Zac iba a tomar todo aquello..


- No sé lo que pasa entre nosotros..solo sé que...-Zac hizo una pausa.


- No soy muy bueno explicando lo que siento sabes? Nessa lo miró fijamente, aquellos ojos fríos y azules de repente no parecían tan fríos como siempre..Nessa parecía poder leer lo que ellos decían.. 

- Lo sé.- dijo Nessa. - No tienes que explicarme que me quieres.. 

Zac se quedó callado unos segundos, penetrando la mirada de Nessa mientras ella le sonreía.




- Cómo lo puedes saber si ni siquiera yo lo tengo claro?- dijo él.




- Lo tienes claro.- dijo Nessa. - Solo que todavía no lo quieres aceptar.




Zac rió.




- Le diré a Esther que lo del matrimonio ya no va más.




Nessa abrió los ojos impactada.




- estás loco? no puedes hacer eso!




- qué? quieres q me case con ella o qué?




- No! pero tenemos que fingir por ahora que nada sucede..me entiendes? fingir que sigues odiándome y no podemos permitir que nadie sospeche lo nuestro..sino estamos perdidos.




Zac la miró, ella tenía razón.




- qué propones entonces?.- dijo Zac maliciosamente.




- Propongo que engañemos a todos..será divertido..


Nick estaba acostado en el sillón de su sala leyendo el periodico cuando el timbre sonó.




El chico de ojos marrones caminó hacia la puerta y la abrió.Ashley entró llorando inconsolablemente.




- Ashley qué te pasa?- dijo Nick preocupado viendo a la rubia en aquel estado.




- Hablé con David.- dijo Ashley. - y me dijo tantas cosas horribles!.




Ashley lloraba, Nick no pudo evitar sentir un profundo dolor al verla en aquel estado.

- No llores...no es tu culpa.- dijo Nick mientras la abrazaba. - hay veces que las personas se comportan de formas extrañas...




Ashley se aferró a Nick con fuerza.




- No es justo sabes? no es justo!- dijo Ashley.




Nick la tomó de la barbilla y la hizo mirarlo a los ojos. Sus ojos color miel penetraron los  de Nick, sintió cómo una corriente iba a gran velocidad por todo su cuerpo.




- Nick yo...- dijo Ashley.




- No.- dijo Nick apartándose. - No digas nada.




Ashley lo miraba. Durante años los dos se atraían, ella lo sabía, pero ninguno se había atrevido a confesárselo...solo por un motivo grande:Corbin.




- Ahora tu también me vas a dejar?- dijo Ashley. - Ya estoy harta de tener que callarme lo que siento por ti solo porque eres el mejor amigo de mi hermano! estoy harta de todo en mi vida! lo único que quiero es morirme!




- No digas eso!- dijo Nick. - sabes muy bien que lo nuestro es imposible!




- Y todo este tiempo me he calado a todas las tipas con las que has andado! y tenía que aguantármelo porque siempre Corbin no lo iba a permitir!




- Yo también tenía que verte salir con un montón de tipos! no eras la única que tenía que aguantarse cosas!- dijo Nick. - Pero las cosas deben ser así entiéndelo! lo que sentimos no puede ser y nunca podrá ser.






Ashley se secó las lágrimas y lo miró llena de ira.




- El día que dejes de tenerle miedo a lo que piense mi hermano hablamos Nicholas!.




Y con esto se fue. 

Nessa se vistió y se agarró el cabello en una cola.




Salió caminando por el pasillo y llegó hasta la sala. Podía escuchar los ruidos provenientes de la cocina.


Entró en ella y vio a Zac, cocinando.




- y quién te enseñó a cocinar?- dijo Nessa.




Zac la miró con una media sonrisa en su rostro.




- Mi papá.




Nessa se rió.




- Yo no sé nada de cocina...puedo morirme de hambre.. 

- Lo sé.- dijo Zac. - Recuerdas que llevo dos años investigándote?




Nessa se sentó en una silla.




- Vas a dejar de ser un aguilucho?- preguntó Nessa.




Zac permaneció en silencio.




- No.




Nessa lo observaba.




- Ni siquiera si yo te lo pidiera?




Zac se volteó y la miró.




- Ni siquiera por eso.




Zac siguió cocinando.




Nessa permanecía en silencio, no pretendía cambiarlo de la noche a la mañana, aquello llevaría tiempo..pero lo iba a hacer...fuese como fuese.


Zac y Vanessa comían.




El chico la miraba fijamente y ella le correspondía aquellas miradas también.




Ninguno de los dos decían nada, disfrutaban de solo mirarse e imaginarse cosas en su cabeza.




- Te puedo decir algo sin que te enfades?- dijo Zac.




- Si, claro.- dijo Nessa.




- Cuando estábamos en Newman School, tienes que admitir que eras insoportable..siempre queriendo ser la mejor en todo..eras de verdad insufrible.




Nessa rió y fingió cara de ofendida.




- No Efron, te equivocas; yo no pretendía..soy la mejor, y siempre lo seré. Y tú eras más insufrible que yo..créeme..




- Ah si Hudgens? pues tú eras un ratón de biblioteca.- dijo Zac provocándola.




- Y tú eras un pequeño hurón.- dijo Nessa.




Con esto Zac se levantó de la silla para agarrala pero ella se levantó antes y salió corriendo.




- No! déjame Zac.- dijo Nessa riendo poniéndose tras el sillón de la sala.


Draco caminaba hacia ella maliciosamente.






- No lo creo Hudgens.- dijo Zac con una media sonrisa en su rostro. - Vas a pagar lo que has dicho.






Zac corrió hacia ella pero Nessa también lo hizo y se le escapó de las manos.